viernes, 16 de diciembre de 2011

Nacho Diego, miente o revienta

Estoy harta. Sí, mucho. Estoy harta de Nacho Diego, presidente del Gobierno y del PP de Cantabria. Aunque muchos piensen que es a causa de nuestra ideología encontrada, no, no es ese el motivo.
Me han hartado sus mentiras. Esas que, siguiendo la estela de sus jefes, advertían al mundo que Cantabria estaba en quiebra y que él, en su omnipresencia político-divina, solucionaría los cien males y pestes cántabras en tan sólo 100 días. Y se me están haciendo largos los días. O eso, o es que ya han pasado 199 días (que es casi el doble), no veo asomar milagro alguno y se me resienten las rodillas. Es la edad, una ya no aguanta los milagros como antes. Ni los milagros ni los cuentos chinos.
Y es que no sólo el paro ha aumentado de manera preocupante en Cantabria desde que arribara el PP al gobierno, es que el insigne presidente no ha dicho ni una verdad por pequeña que sea.
Se ha inventado deudas, se ha inventado facturas y ha elaborado un guión de mentiras que dejaría pequeños al propio Spielberg. Cualquier cosa con tal de insultar y vejar políticamente a los que él considera sus enemigos. Sí, enemigos, no rivales políticos. Y el que sólo vive para saciar sus odios e inquinas suele acabar en el juego del todo vale si la mayoría es absoluta.
Dos días antes de las elecciones generales, armado de boli y panfletos, recorría la Comunidad pidiendo firmas para pedir la devolución de la deuda histórica de Cantabria que él tasaba en 491 millones. Llegó Rajoy, y es como si el manto virginal se hubiera apoderado de él, cambiándole la voluntad de la petición del dinero, supuestamente debido, por una terna de sacrificios de los cántabros para gloria y alabanza Mariana. Incomprensible. ¡Como si 491 millones de euros fueran una minucia! Son las cosas de las deudas, visibles o invisibles según el color del banquero. Y la Historia, que hay tantas como manos empuñen las plumas que la escriben.
Es Diego hombre de escasa talla democrática, y no por la altura física (sí, vale, una cuarto y mitad menos que el Alcalde de Santander y medio cuarto más que el de Torrelavega) sino por lo zafio de su comportamiento que hace flaco favor a los que sí creemos que la Democracia tiene algunas reglas que conviene no saltarse; el “por qué no te callas” al Rector de la Universidad de Cantabria y el castigo de la disminución de la partida para la universidad en un 30% como castigo a las alabanzas de un buen trabajo en la Consejería socialista anterior, o vomitar  a algunos diputados socialistas que carecían legitimidad, dan buena prueba de la chulería grotesca y deleznable de quien debería mantener mucho más las formas democráticas.
¿Y los presupuestos? Pues más de lo mismo y al más puro estilo del PP, más dinero a los centros concertados en detrimento de los públicos, la eliminación de las casas de acogida a las mujeres maltratadas, recortes en Sanidad, fin de todos los programas de empoderamiento de la mujer en el ámbito rural, paralización de la inversión, recortes a los servicios que se impago de subvenciones. Y mentiras tras mentiras. Deudas supuestas, deudas que no reconoce ni  el Informe Económico de Cantabria  y mentiras que lo único que hacen es poner en evidencia al mentiroso.
Todos los que hemos llegado nuevos a nuestros Ayuntamientos, Parlamentos y demás, nos hemos encontrado con deudas, con asuntos pendientes y con cosas para solucionar. Pero no nos eligieron para odiar, inquinar, para vengarnos ni para lamentarnos. El buen gobernante aprovecha los aciertos y corrige lo errores.
Señor Nacho Diego, cuando su sed de venganza se haya saciado, lo mismo ya es tarde y Cantabria no aparece ni a la cola. La economía no se corrige con palabrería y misas de 12. Se corrige mirando por y para la gente. Y, tranquilo, que la Democracia, mucho más vieja que usted, habrá de ponerle arriba o abajo según usted la encare.
Para la estulticia no conozco medicina, pero para sus déficits democráticos sí, curas ingentes de humildad. Se lo merecen los ciudadanos y los que, sin llorar, velamos por nuestros ciudadanos y ciudadanas.

2 comentarios:

  1. Lo que te pasa Leire, es que careces de sentido del humor, y no comprendes, que algunas personas, que fueron a colegios privados, se quedaron en el 68, que les parecia muy entretenido y jamas pasaron de dicha cifra, pues la siguiente era pecado y mortal por supuesto, por lo tanto, el 100, para ellos, es un mito, como no saben contar.... numeros, menos la realidad, que esto es cosa dura y dificil, es mejor vivir en un mundo irreal, creado por aldateres, correveidiles y amiguetes, y la chusma, que eso somos el resto, cuanto mas lejos mejor, por lo menos hasta las proximas elecciones, pues si no tiene pa comer, que se dedique al asalto, total ellos tienen esculta, que no tienen pa dormir, pues que duerman en la calle, que como ellos no la pisan, los mundos de yuppi, se arreglan como dice merkel, con palo al funcionario, que total no produce mas que bienestar y salarios a la china, por comida, y no a todas horas, que engorda, como te decia es que en politica, ya no hay sentido del humor, nadie piensa ya en hacer autovias ni aves, hay que volver a los caballos y a las carretas, que ademas contaminan menos y no consumen gasolina, y lo de la construccion, hay que conformarse con el lego, que no necesita creditos

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  2. Debe ser eso, que me falta el sentido del humor. No sé si mejorarlo a base de cervezas, porros o de vídeos de Gila.

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